Podium
En este episodio grabado nada menos que entre la gran magnirrotura de mosaicos, columnas jónicas, cúpulas y ramillete de bajorrelieves que alberga el Petit Palais de París, nos adentramos, de la mano de la exposición “Ténèbres et lumière”, en el sensorio barroco que palpita en la pintura de José de Ribera: cruisings martirológicos, santos muy inviting bottoms, dermis sanguinosas y santísimos sacramento agusanados. Una travesía por el crudo tenebrismo de una pintura que, en las inmisericordes palabras del escritor Théophile Gautier, “parece haber sido ejecutada para caníbales”, con figuras a las que “deja retorcerse como trozos de serpiente en una sombra hosca y amenazadora que no ilumina el mayor rayo divino”. Acompañadnos, amigas, en este intento parisino por averiguar si en los orígenes de la mafia napolitana está un español nacido en Játiva, calibrar los compromisos del mecenazgo y demostrar una vez más que el convento está siempre agazapado hasta en los rincones más insospechados y “licenziosetti” del barroco. Si no puedes vivir ni un segundo más sin escuchar nuestra momento más “Bertín Osborne-coded” hasta la fecha, dale corriendo a play.
Gracias y aplausos y amores al Instituto Cervantes de París por auspiciar el desembarco parisino del barroco, a Eduardo Navarro por su delicioso apostolado y a todas las amigas que vinisteis a arroparnos (¡también las que no pudisteis entrar!)
En recompensa a una temporada alarmantemente escasa en sosiego conventual y regocijo carmelita, y con ánimo de paliar los excesos ruborizantes a los que nos arrastró Giulia di Marco con su club de swingers napolitano, en este episodio nos adentramos en la vida conventual de las carmelitas más repipis, más pijas, más empollonas, más talentosas, más versátiles, más multidisciplinares y con el mayor trastorno thirsty de la personalidad del siglo XVII: Cecilia del Nacimiento y María de San Alberto. Criadas en el sistema de homeschooling más estricto del siglo XVI, Cecilia y María explotarían en el convento todo lo aprendido de mano de su madre, Cecilia Morillas. ¿Tañer el clavicordio? Desde los siete años. ¿Leer latín? Todavía gateaban. ¿Restaurar cuadros al óleo? Mejor que el artista más reputado de Valladolid. ¿Dibujar a mano alzada? Día sí y día también. ¿Componer canciones místicas? Tan buenas que nadie podía creer que no fueran de San Juan de la Cruz. Acompañadnos en esta experiencia inmersiva repleta de DIY cosmográficos, recreaciones botánicas, fantasías eremíticas, bilocaciones textuales, negaciones autoriales, envidias carmelitas y precuelas poéticas de Berta García Faet. Si no puedes vivir ni un segundo más sin saber quién fue la primera mujer en España que ingenió “un globo terrestre, tejido sobre una perfecta bola de corcho y laureados de seda a punta de aguja con sus matices y colores, todos los mares y divisiones de provincias y reinos del orbe”, dale corriendo a play.
Turbadísimas y apesadumbradas al darnos cuenta de que en esta temporada escasean los estrellatos conventuales, y resignadas a transitar una vez más el calvario del sonrojo, en esta ordinariez de episodio os regalamos la incorporación más socialité, estratega y casquivana de vuestros cuadernitos de monjas. ¿Su nombre? Giulia di Marco. ¿Su pecado? Haber jugado, como haría cualquiera, a fingir un poquito de santidad y haber fundado, en secreto, la secta poliamorosa más exclusiva de Nápoles. Bienvenidas, amigas, a este recorrido por los cuartos oscuros del virreinato napolitano, la trieja más maquinadora de Italia, un club de swingers frecuentado por monjas, curas, obispos, virreyes, tarifas planas con dios, insólitas terapias de fertilidad, el inquietante espacio Santo Amor y guerras encarnizadas entre dominicos y jesuitas. Acompañadnos en nuestra incursión en las truculencias de la Caridad Carnal: la comunidad pansexual, el cenáculo orgiástico, los Illuminati de Eros. Os garantizamos, eso sí, que a este episodio vendréis por el appeal licencioso pero os quedaréis, al final, por los irresistibles debates teológicos que enfrentaban la predestinación y el libre albedrío. Os advertimos, sobre todo, que sucumbiréis para siempre y sin remedio al arrollador y tiernísimo embrujo de la Caridad Carnal. Si no puedes vivir ni un segundo más sin descubrir cuál es el hilo conductor que conecta a Pitita Ridruejo con todo este desmadre napolitano, dale a play.
Construir cartografías alternativas de nuestros siglos más favoritos supone, casi siempre, recorrer el pasado con la frustración pero también con el regocijo de quien se sabe urdiendo una poética de la ruina. Retazos, tachones, pérdidas, usurpaciones y censuras, pero también reconstrucciones, recreaciones, posibilidades y transformaciones infinitas. De la mano del Bode Museum y la Embajada de España en Berlín, en este episodio nos arrojamos a un nostálgico recorrido que, en palabras de uno de nuestros más predilectos jesuitas, avanza “de la sombra a lo corpóreo”, poniendo a prueba nuestro lexicón barroco para rehacer un patrimonio alternativo: espeluznantes POVs históricos, una Santa Inés perdida para siempre en el incendio de un búnker, ventriloquismos de numismáticos decimonónicos por cortesía de la Inteligencia Artificial, mucho ASMR pictórico, diademas de Hello Kitty, pulgas luteranas, reliquias falsificadas y muchos, muchísimos Templos de Salomón. Si no puedes vivir ni un segundo más sin escuchar nuestra respuesta a nuestro hater más afilado, si necesitas saber ahora mismo cómo y por qué defendemos nuestro laboratorio de “factos edulcorados, neoconceptos y anglicismos varios al gusto de las oyentes de la década”, dale corriendo a play.